Hace unos días nuestra amiga Carlota nos planteaba una duda que le había surgido durante la reforma de su nueva casa: poner ducha o bañera. Está claro que en la elección de uno u otro dependen factores como la existencia de niños en la vivienda, si hay personas con movilidad reducida, número de cuartos húmedos en la vivienda, la superficie del baño…Las ventajas de la ducha son la accesibilidad y el espacio, es la mejor opción para los baños pequeños ya que ocupan la mitad de una bañera, dejando así espacio para otros sanitarios. Se pueden colocar en cualquier esquina o rincón y son bastante planas, lo que hace que sea una buena opción para personas mayores o con movilidad reducida. En cambio, si hay niños en la vivienda, la bañera es la mejor opción, no solo por el tema higiénico sino porque también el baño se convierte en un momento de relax y juego para los más pequeños. Además, darse un baño con espuma, aunque sea una vez al año, es de las cosas más relajantes que existen. En cuestión de estética tenemos de todo, duchas super sofisticadas con hidromasaje e infinidad de soluciones decorativas así como bañeras que van desde las más clásicas con cuatro patitas hasta las más modernas con mil funciones que harán del baño un momento de relax total.
¡En una ducha no puedes bañarte, pero en una bañera si puedes ducharte!
Si tenemos espacio suficiente existe también la opción de poner ambas, que sería lo ideal, así tenemos las ventajas de la ducha y la bañera juntas. Hoy vengo con una selección de imágenes de baños con ducha y bañera.
¡Que tengáis feliz jueves!